Cuando pienso en computadores portátiles, siempre recuerdo hace 8 años atrás cuando compré mi primera y única PDA: una Palm IIIx con pantalla monocromática. En aquel momento tenía todo lo que hubiera deseado de un aparato de ese estilo: una capacidad parecida a la de mi vejo 486 que tuve 10 años antes, pantalla sensible al tacto y un lápiz para entrar texto usando un sistema de reconocimiento de caligrafía. Con el pasar de los años, aquel bichito se mudó rápidamente al reino de la obsolescencia; sus descendientes incorporaron otras cosas bastante interesantes: conexión a internet wireless, pantalla a color ultra nítida, mp3, fotografía y video digital, teléfono, etc. Sin embargo, me mantuve fiel a mi vieja PDA hasta q unas baterías reventaron dentro de ella, corroyendo parte de sus circuitos. Fue entonces cuando tuve mi primer contacto los TabletPCs, que a ojos de un profano lucen como una PDA algo crecidita, pero que son en realidad, un PC laptop un poco más pequeño que el promedio, c...